¿POR QUÉ ES BUENO CANTAR EN UN CORO INFANTIL?
Todo niño tiene acceso a la música, y el canto es el mejor camino para llegar a ella. Una buena canción encierra tesoros que el niño está ávido por descubrir y que satisfacen todo su caudal afectivo. Según Edgar Willems (“Las bases psicológicas de la educación musical”): “Es evidente que, entre otras formas, cantando, el alumno descubre como por arte de magia el sentido de un trozo musical, y por este medio, el tiempo real, el fraseo, y los diversos matices dinámicos, o plásticos”.
Los niños que se expresan sin temores sentirán gran satisfacción cantando en un coro infantil. Los niños con tendencias exhibicionistas, cantando en un coro infantil encauzarán sus fuerzas desbordantes en una tarea que por ser de todos los fraterniza. El niño tímido, con problemas de comunicación social, encontrará en el coro infantil un ambiente propicio para salir de su estrechez.
Así el coro infantil adquiere un enorme valor social. Cantar en coro le enseña al niño a esperar, le hace adquirir conciencia de la propia personalidad, respetando también la del compañero. El niño aprende en el coro a cumplir la misión que le corresponde, sintiendo que ella es tan importante como la de los demás.
Hay otros valores, no menos trascendentes, en la actividad coral. En un coro el niño educa el oído armónico, además del melódico; el coro infantil estimula el despertar de la sensibilidad; en el coro el niño educa su voz de una manera sana para sus cuerdas vocales gracias a la técnica que el director del coro le enseñará.